Una de las maravillas del mundo del vino es que la gente que está en la
industria siempre o casi siempre es interesante y agradable. Es un mundo difícil
desde el punto de vista de negocios, pero desde el punto de vista del ambiente
a mi parecer, no podría ser mejor. Chefs, productores, consumidores,
sommeliers, fanáticos, obsesivos e intermediarios todos unidos por una misma pasión: el Vino.
En alguno de mis viajes y ferias de vinos conocí a dos personas
maravillosas que me invitaron hace poco en PARIS a comer a "Le
Cinq" Restaurant del Hotel famoso Parisino George V. Pasamos una
noche espectacular comenzando la visita en la cava del Hotel, (cerrada para el público en general). Poder conocer la cava fue una
experiencia única. Desde pasar por la parte de servicio del hotel deslumbra la inmensidad de los pasillos y uno logra apreciar el arte del servicio y
recepción de uno de los hoteles más lujosos del mundo. El recorrido incluye bajar a un subsuelo
10 mts subterráneos y encontrarse con una cava repleta de las etiquetas más
reconocidas del mundo.
Habia una pared entera de botellas de Chateau Petrus, que habian sido bebidas todas por el mismo huesped cada vez que se hospedaba en el Hotel. Tenian añadas de los Champagne mas reconocidos de Francia, varias cosechas del famosisimo Chateau d´Yquem y joyas de la Borgoña como La Tache.
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